Comienzo con una afirmación: Yo soy gnóstica !.
No es una religión.. no es una secta.. no es una creencia en sí misma.   Es una lectura filosófica y metafísica del Ser Humano desde y hasta una base y un fin de pura conciencia espiritual.
Fuí educada en la religión católico-cristiana, me he críado en élla, y la respeto (dentro de una lógica intelectual) al igual que puedo respetar otras religiones.
De hecho, los gnósticos no nos cerramos a ninguna religión.  Todo lo contrario.  Nos aperturamos a todas y les abrimos las puertas a cualquier persona que, además de la fé ciega, utilice la cabeza para algo más que para lucir un lindo peinado y que, por supuesto, sus palabras y sus hechos demuestren que, dentro de su cuerpo físico, hay un Alma.
Seguid leyendo y entenderéis de qué hablo…

LOS GNÓSTICOS (El nacimiento de una Conciencia Superior):

Gnosis, literalmente, significa «conocimiento y sabiduría».
Durante los tres primeros siglos de la Era Cristiana surgió el movimiento de los gnósticos, que buscaban la verdad y la elevación espiritual, basados en las doctrinas de Cristo (Antiguo Testamento, Nuevo Testamento y Evangelios Apócrifos).
El objetivo era armonizar la doctrina cristiana con los principios fundamentales de las demás religiones (por esta razón, también se estudia la Torah hebrea y el Corán islámico dentro de los estudios gnósticos), a fin de formar algo así como una religión universal, donde nadie quedara excluido.
Actualmente, el Movimiento Gnóstico Universal tiene sedes en todo el Mundo.  Hoy, el propósito que se persigue es trabajar con distintas técnicas para lograr activar la Conciencia Divina que habita en todos los seres humanos.
Al activarla, se tiene acceso a un conocimiento superior que permite desvelar los misterios de la creación del Universo y del hombre.
Este conocimiento no es patrimonio de ninguna raza ni de ningún credo o religión. Puede lograrse fácilmente despertando la Conciencia Superior en nuestro interior.
El Ser Supremo es SÓLO uno: Le llamemos Yaveh, le llamemos Allah o le llamemos Dios…

Los gnósticos se definen como una Escuela de Auto-conocimiento sin fines de lucro. Su interés primordial es orientar a las personas para que encuentren, por sí mismas, su Conciencia Divina y puedan disfrutar de sus beneficios.
Al tener la conciencia dormida, las personas están gobernadas por sus pensamientos, sentimientos y acciones, generalmente cargadas de ira, envidia y orgullo.
Según los gnósticos, estos defectos  de la personalidad originan todos los males, incluídos los físicos, como las enfermedades.
Al acceder a una Conciencia Superior se adquieren virtudes y facultades poderosas que permiten mejorar la conducta en los planos afectivo, económico y de la salud.
Con técnicas concretas de autocontrol, los gnósticos logran activar la Conciencia superior para acceder al conocimiento universal, fuente de sabiduría, alegría y prosperidad.

LOS LIBROS DE KAOM:

Este trabajo apunta a la superación de adicciones o problemas de salud.
Muchos alegan «a su mala suerte» a la crisis económica, a las envidias o a sus propios defectos sin saber que tienen en su poder la llave que abre todas las puertas para que puedan cumplirse sus mas anhelados deseos.
Los gnósticos reconocen la influencia de leyes universales que no deben ser violadas, si no se desea sufrir las consecuencias.
Para evitar acumular karma en esta vida, o sea para no tener que pagar por los actos negativos que cometemos, hay que ser cuidadosos y respetar todas estas leyes.
Según el movimiento gnóstico, existe una entidad llamada Kaom, que es la encargada de guardar la historia personal de cada ser humano.  Kaom escribe en los libros personales de cada ser humano todas las acciones, buenas o malas, que se cometen a diario.
Estos libros están, junto con Kaom, en otra dimensión, dentro del plano astral, y forman parte del registro akásico.
Nadie puede borrar una sóla palabra de lo que está escrito y deberá pagar por cada una de sus malas acciones o beneficiarse, en próximas vidas, por la buenas acciones realizadas.

EL CUERPO ETÉREO:

Una de las fórmulas de equilibrio y superación, que suelen utilizar los gnósticos, es la de los Viajes Astrales.
Cuando soñamos, nuestro cuerpo astral se desprende y «viaja» a otras dimensiones.
Estas dimensiones son diferentes a la realidad, aunque se le parecen mucho.
En el plano Astral, el cuerpo puede realizar acciones que le son imposibles durante la vida ordinaria. Muchas personas realizan sus deseos, precisamente, a través de los sueños.
Ésto sucede porque , en esta dimensión, está permitido al cuerpo astral realizar verdaderas proezas, cumpliendo así en otro plano, los deseos del durmiente.
Es por éso que, al mundo de los sueños, se le llama también el «mundo de los deseos».
Si se logra dominar conscientemente al doble astral y somos capaces de orientarlo, es posible modificar, durante el sueño, la realidad futura que nos tocará vivir.
Aquella persona que tenga un dominio del cuerpo astral podrá lograr beneficios maravillosos, pero al cuerpo astral hay que educarlo. Lograr estar conscientes en el momento de soñar y poder manejar los sueños, a voluntad, requiere entrenamiento.
Existen algunas técnicas y mantras que, de forma personalizada, se pueden aprender al principio… 
No obviemos que los viajes astrales sirven para acercarnos, cada vez más, a Dios ya que Él es una energía astral; no física; pero también puede existir el riesgo de «ir» y «no volver» si no se sabe utilizar este don.
En la medida que una persona realiza un trabajo con la energía creadora, ese cuerpo comienza a crecer y se convierte en un cuerpo astral de tipo solar.
El cuerpo solar es un cuerpo que no se deja dominar por el ego y puede, por tanto, acceder a realidades superiores, así como a manejarse en el nivel astral a voluntad, modificando la realidad.
El tema a que se abocan los gnósticos es lograr un desdoblamiento astral consciente, o sea despertar la conciencia desde lo que es el mundo físico, para luego llevarla a lo que es un desdoblamiento consciente en el astral.
Aquella persona que tenga un dominio determinado del cuerpo astral puede viajar incluso al pasado o al futuro y ver pasado y futuro en sí misma y en los demás.
La realidad está regida por cuarenta y ocho leyes.  El mundo astral se rige por venticuatro ya que las leyes de la física no existen.

LEY DE AFINIDAD:

Otra de las creencias de los gnósticos es la Ley de Afinidad.
La Ley de Afinidad hace que las personas atraigan las cosas que temen o que desean.
Es como un abrir distintas puertas del Ser y permitir que entren, en nuestra vida, influencias beneficiosas o negativas.
Éste es el origen de los daños y hechicerías (malos deseos..  envidias ajenas.. etc.) de que son víctimas las personas.
Si creemos ser desdichados en el amor – o que padeceremos carencias de dinero -, automáticamente, el Universo recibe el mensaje y se abren las puertas para que ésto suceda.
Ésto es así porque, sin saberlo, la persona invoca la Ley de Afinidad que hace que todo lo que es parecido a lo pensado se acerque a nosotros. Entonces, la tristeza trae más tristeza y el desaliento, mayor pesar.
Los gnósticos logran, por medio de conjuros, evitar que surjan los hechos indeseables.
Las palabras mágicas obran contra toda adversidad producida por las transgresiones a la Ley de Afinidad.
También, con estos conjuros (no son «brujería»; son «oraciones»), protegen a la persona de cualquier entidad negativa que quiera atacarla y aseguran no sólo el cuerpo físico, sino que también brindan protección al cuerpo etéreo ante lo que pueda sucederle en el mundo astral.

¿CÓMO SE ACTIVA LA CONCIENCIA SUPERIOR?

Para lograr una revolución de conciencia que permita despertar a una realidad superior, los gnósticos tienen en cuenta tres factores:

MUERTE PSICOLÓGICA: Consiste en la muerte, no de la persona, sino de su Ego, portador de los defectos que impiden la realización individual y que atenta contra la realización personal del Ser.  Se trabaja para desterrar los vicios y defectos y, para lograrlo, se valen de la enorme fuerza que cada individuo tiene dentro de sí y que proviene de Dios.

NACIMIENTO ALQUÍMICO: Es la transmutación del hombre corriente en un ser elevado de luz.  Para lograr un estado superior de belleza y salud se propone el uso de la energía sexual positiva (similar al tantrismo o al taoísmo). También se debe sublimar la energía sexual mediante el arte de la selectividad. Ésto permite que una mujer – o un hombre-  que cultive, en sí, pensamientos de amor supremo, termine encontrando a su pareja dentro de su propia vibración y que el Ser Supremo le «aparte» a quién se le acerque con vibraciones no concordantes.

SACRIFICIO POR LA HUMANIDAD:  Tener la sabiduría y el amor, a nuestra disposición, no es suficiente.  Es necesario transmitirla a los demás seres sin pedir nada a cambio y sin hacer distinciones de sexo, credo, origen o raza. Es un paso fundamental si se desea elevar la conciencia para poder acceder a los planos más etéricos.  Nunca se debe comerciar con un don intrínsico a nuestro Ser.  Es un regalo recibido, de Dios, que sólo se puede, asimismo, regalar.

Espero que os haya gustado esta nueva «entrega».
Un abrazo y… hasta la próxima !!!!!